El mundo empresarial está en constante cambio y evolución, por lo tanto los emprendedores, empresarios y sus empleados también deben tener la capacidad para adaptarse a los cambios y las nuevas disposiciones que el mundo de los negocios impone.
Por supuesto, la preparación, la capacidad y el conocimiento del mundo empresarial, del mercado, de finanzas y economía y otras habilidades, son fundamentales para desempeñarse como emprendedor y andar a paso firme por el camino hacia el éxito.
Sin embargo, más allá de la preparación y las capacidades extraordinarias que muchas personas pueden tener, la motivación que las personas tengamos para hacer algo, se ha convertido en un factor fundamental y completamente necesario para alcanzar el éxito, razón por la que las conferencias motivacionales que imparto se han convertido en una herramienta muy útil e importante para muchas organizaciones con las que he tenido el placer de trabajar.
Para que un proyecto y una empresa puedan crecer y desarrollarse, es necesario contar con personal, empleados y elementos, en todos los niveles de la estructura de la organización, plenamente motivados. Cabe aclarar en este punto, que la remuneración económica, el sueldo que se paga quincena tras quincena o mes tras mes a los miembros de la empresa, no necesariamente son la mejor motivación.
Hace no mucho tiempo, prácticamente ninguna empresa, pequeña, mediana o grande, se preocupaba por la motivación de sus empleados. Por fortuna, muchas organizaciones se han dado cuenta que este factor es muy importante para mejorar y tener la mejor productividad y el mayor éxito y es por ello que hoy en día muchas compañías realizan actividades y llevan a cabo estrategias y planes con el fin de motivar e incentivar a sus empleados para que estos hagan su trabajo de la mejor manera.
Diferentes estudios realizados por la psicología organizacional han demostrado de manera contundente que la efectividad de los trabajadores, la productividad de una empresa y el éxito de toda organización, están directamente relacionados con la motivación que los miembros de la empresa tengan y el crecimiento personal que sus labores les ofrecen.
Esto es fácil de explicar, pero difícil de llevar a cabo. Todas las personas tenemos motivaciones particulares, valores, ideas y metas propias, lo que implica que cada empleado de una empresa tiene diferentes razones para hacer las cosas y por lo tanto un diferente grado de motivación. En otras palabras: la motivación es personal.
Lo anterior implica que por más intentos que se hagan por explicar a un empleado las metas y objetivos de la empresa, la importancia de sus labores y por integrarlo a la organización, si la persona no encuentra su motivación para hacer su trabajo, terminará cumpliendo con sus labores por obligación y no por gusto, lo que probablemente implique que no hará de la mejor forma su trabajo.
Por lo tanto, el objetivo más importante por el que trabajamos al ofrecer conferencias motivacionales es explotar el potencial de crecimiento y compromiso que toda persona tiene e impulsarla a encontrar su propia motivación para querer hacer su trabajo por gusto y no por obligación. De esta manera se logra provocar un cambio en las personas que resulta en un bien común.
Y es por esto que el trabajo que realizo como coach y conferencista es apreciado por las empresas, pues con mi trabajo, en conjunto con la aplicación de estas enseñanzas por parte de los líderes de las organizaciones, juntos hemos logrado motivar a un gran número de empleados, haciendo así su trabajo más placentero y consiguiendo resultados mucho mejores para la compañía, corporación o entidad.
Al llegar a este punto es necesario mencionar, y que todos tengamos en mente, que los líderes son muy importantes para el proceso de motivación, pues el líder es la persona capaz de guiar a un equipo al éxito, pero sobre todo, es la persona capaz de inspirar a quienes le siguen a encontrar su motivación personal y recorrer juntos el mismo camino para alcanzar el éxito personal y empresarial. Respecto a esto, hay algunos puntos muy importantes que se deben tomar en cuenta para que logremos encontrar nuestra motivación y al mismo tiempo convertirnos en líderes que inspiren a otros a encontrar la suya.
Durante las conferencias motivacionales que ofrezco, el primer punto básico que invito a los asistentes a considerar siempre es el input positivo, es decir, tener la mejor actitud, la mejor disposición y siempre estar dispuesto a recibir del exterior información, consejos, experiencia, enseñanzas y herramientas positivas, agradables, que nos ayuden a tener el control de nuestra vida y enfocarnos a hacer lo que nos gusta y desarrollarnos como personas y profesionales.
Rodearnos de personas positivas, exitosas y emprendedoras es fundamental para que nosotros mantengamos nuestro positivismo y motivación. También está psicológicamente comprobado que el humor, la actitud y la energía de las personas que nos rodean pueden contagiarnos e impulsarnos o frenarnos, según sea el caso. Así, si nos rodeamos de personas negativas, nosotros mismo probablemente tendremos actitudes negativas; por el contrario, si somos parte de un grupo de personas positivas, nuestra actitud será igualmente positiva y los resultados de esto seguramente serán favorecedores.
En el caso de los empresarios, es altamente recomendable buscar y contratar un grupo o un conferencista que ayude, asesore y ofrezca apoyo en los procesos de motivación y crecimiento personal y profesional de equipo o de los empleados. Esto es de gran utilidad, pues la presencia de un coach y el aprendizaje que una COACHferencia puede ofrecer a los empleados es invaluable y sumamente redituable para todos los miembros de una organización, tanto a nivel grupal como individual.
Finalmente, es importante que se premie a quienes realizan un buen trabajo. Si bien hemos aclarado y entendido que la motivación es personal, un premio al alcanzar la meta siempre es bienvenido y aceptado por cualquiera de nosotros y puede ayudar a incrementar nuestra motivación para seguir realizando un buen trabajo.
Todo esto en conjunto, la motivación, el éxito y crecimiento como grupo y empresa, no solo implica un beneficio individual para los empleados y una ganancia económica para la organización, sino que crea un verdadero vínculo entre la empresa y quienes la conforman, obteniendo así identificación, lealtad y compromiso con la compañía.
Estos son solo algunas acciones importantes para que el empleado encuentre la motivación para realizar de la mejor manera su trabajo y que así crezca junto a la empresa, acciones que al llevarse a cabo ofrecen resultados casi increíbles.
Mi experiencia en el camino hacia el éxito y mi experiencia como coach y conferencista me ha demostrado que las personas, empresarios y empresas pueden cambiar radicalmente, de manera positiva y desde el interior. Y esta es precisamente una de mis motivaciones y la razón por la que doy conferencias motivacionales: inspirar el cambio positivo en las personas, pues es primordial trabajar y atender a las personas antes que a la organización, ya que las personas son quienes construyen y llevan al éxito a las organizaciones.
