Cuando hablamos del éxito y competencias en las organizaciones, contar con capital humano de calidad es indispensable, pues este depende el éxito de la compañía, que a su vez puede llegar hasta donde se encuentren los límites de su fuerza de trabajo. En los modelos laborales anticuados, la figura del jefe era la del ejecutivo más importante, que delegaba la mayor parte de las tareas y solo se enfocaba en la entrega de resultados, sin poner atención en los procesos para alcanzar el éxito; sin embargo gracias a la evolución de los RRHH y del coaching empresarial, se ha podido reemplazar este concepto por el de liderazgo.
El líder es, en la escala jerárquica, el superior de los colaboradores, quien asigna tareas, las revisa y tiene una gran importancia dentro de la organización, pero no se limita a regañar o a controlar a los colaboradores que están a su cargo, sino que busca el trabajo cooperativo, coordinado, la ayuda recíproca, ser un ejemplo de inspiración para que el resto del equipo alcance los objetivos con un desempeño eficiente y eficaz.
No todas las personas somos líderes natas, es decir, que poseen las cualidades necesarias para establecer objetivos, guiar a los compañeros, establecer un diálogo asertivo con los colaboradores y otros rasgos que se presentan desde el nacimiento, de forma natural. Pero sí es posible desarrollar estas cualidades en las personas que no las poseen, o potencializarlas en los líderes por naturaleza para que enfoquen sus habilidades de forma positiva y exitosa entre sus colaboradores.
- Conocer sus necesidadesPara poder ser mejores líderes, debemos saber qué es lo que nuestro equipo de trabajo necesita para alcanzar el éxito; puede ser desde capacitación, asesoría, herramientas de trabajo o el simple desahogo. Por ello se recomienda mantener abiertas las puertas del diálogo y la escucha activa, detectando las necesidades de los colaboradores o equipos de trabajo que se coordinen.
- Reconocer los esfuerzosNo se trata de dar un bono o un aumento cada vez que un colaborador se esfuerza en su trabajo, sino de reconocer las labores bien hechas, las metas alcanzadas y la dedicación; se puede llevar un registro de forma semanal o quincenal y poner las fotografías o los nombres de los colaboradores que se han ganado un premio y felicitarlos abiertamente. Este reconocimiento y valoración por el trabajo será de gran ayuda para crear equipos más productivos.
- Evitar el control excesivoUna de las quejas más comunes por parte de los trabajadores es el control que sus jefes tienen sobre ellos y que les hace sentir que tienen al jefe detrás vigilándoles todo el tiempo. Una de las premisas del coaching empresarial es la confianza, pero también el respeto y la búsqueda de los objetivos planteados, por lo que no es necesario mantener un control estricto e inflexible entre cada colaborador.
Además, se ha demostrado que los entornos más creativos y con mejor desempeño laboral son aquellos con un contexto relajado, que les permita tomar descansos cuando lo necesiten.
- Liderazgo con ejemploLlegar a ser líder no depende solo de las habilidades como facilidad de palabra, espontaneidad, inteligencia o dinamismo; los líderes puntuales, que colaboran con sus equipos de trabajo, que explican las dudas y que saben hacer el trabajo de los colaboradores son mucho más respetados y admirados que los que llegan tarde, se van temprano, delegan tareas en exceso, no explican ni ayudan ni escuchan a sus colaboradores. Evitemos la procrastinación y los hábitos negativos, como la creación de grupitos particulares, los chismes, y la comunicación no asertiva es decir echarle la culpa a otros de nuestros fracasos, evidenciar los conflictos de los compañeros, entre otras acciones.
Solo podemos pedir en otros lo mismo que nosotros les damos.
- AmabilidadOtra parte del viejo estigma del jefe enojón y gritón que teníamos hasta ahora, ha sido reemplazada por la del líder amable, colaborador y flexible, a quien podemos acudir en caso de que se presenten problemáticas, preocupaciones, dudas o sugerencias, y que saben que serán atendidos de forma amable y abierta.
Además de evitar la creación de posibles problemas, la escucha y trato amable permiten que el colaborador se siente en un ambiente de mayor confianza y pueda expresar sugerencias para el trabajo, que probablemente no se nos hayan ocurrido y que puedan mejorar el proceso de trabajo en un área en especial.
- Toma de decisionesOtro rasgo de gran importancia en el liderazgo y que puede ser potenciado con la ayuda del coaching empresarial, es la toma de decisiones pues los líderes con frecuencia se enfrentan a situaciones donde deben actuar con rapidez y eficacia, siempre viendo por los intereses de la organización y del equipo de trabajo. Tener la habilidad de rapidez en las decisiones, sin dudar o hacerlo en el menor grado posible, también permitirá que el equipo desarrolle esta habilidad y mejore cuando le toque tomar decisiones.
- Evitar las acciones para imponer miedoOtra de las acciones típicas de los jefes anticuados son los gritos, los regaños o las acusaciones, injustificadas o no, que imponen temor entre los colaboradores, pero también crean un entorno desagradable, inflexible y del que muchos querrán salir tan pronto como les sea posible.
Tampoco es bueno ser demasiado “blandos”, ya que muchas veces el líder se enojará y tendrá que llamar la atención a uno o varios colaboradores, pero se recomienda hacerlo en privado y tomar las medidas necesarias para corregir las actitudes o solucionar los conflictos presentados.
- Un líder crea más líderesQuizá sea el rasgo más importante y bello del liderazgo, que un líder ayude a sus colaboradores a crecer dentro de las diferentes áreas de una organización, ayudándoles a formarse, prepararse y tener un desarrollo personal y profesional.
Un líder tiene un gran peso sobre sus hombros, ya que tanto la empresa como los equipos de trabajo dependen de sus habilidades, y probablemente deba rendir cuentas a alguien más, por lo que puede necesitar ayuda para potenciar sus habilidades, detectar las diferentes personalidades de sus colaboradores, resolver problemas y generar niveles elevados de confianza y satisfacción en el trabajo.
Si buscas ayuda para mejorar tus habilidades como líder o las habilidades de tus colaboradores, el coaching empresarial es una excelente alternativa y el Coach Ricardo Garzamont (Ricky Garza) puede ayudarte a formar líderes de excelencia; conócelo e incrementa el éxito de tu negocio.
