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Bienvenidos al blog del coach Ricardo Garzamont (Ricky Garza), mediante el cual queremos ofrecerte información útil sobre los temas en los que él es uno de los tres especialistas más importantes en México: el coaching. En esta ocasión hablaremos acerca de una de las principales complicaciones que tienen los conferencistas principalmente cuando los temas fundamentales sobre los que se basan son la motivación, el éxito, la superación y el coaching empresarial y personal, que es conseguir que los escuchas los vean como profesionales.

Y es que en muchas ocasiones, el nerviosismo, la dificultad para hablar en público y el miedo a cometer algún error son factores que influyen en el desempeño y esto tiene como consecuencia que la ponencia no sea del todo buena, lo que puede dar una impresión a los escuchas de falta de conocimiento, calidad y profesionalismo, sin importar el tema sobre el que se está hablando.

Por otra parte, cuando acudimos a una exposición o conferencia de calidad, es imposible no notar la excelencia en ella, el profesionalismo, la capacidad y lo bien preparada que está la persona encargada de llevar a cabo la conferencia, ponencia, exposición o discurso. Para ello, por supuesto, es necesario realizar un buen trabajo, preparar el tema, organizarse, superar el miedo, ser elocuente y empático, identificar las necesidades de la audiencia y confiar en el conocimiento que se tiene.

Si todo esto se lleva a cabo de manera adecuada, las probabilidades de éxito en una conferencia, junta, plática, debate, exposición o discurso de cualquier tipo se incrementan de manera exponencial, por lo que el tema siempre resulta bastante interesante para cualquiera, al grado que el tiempo pasa casi sin que la persona que habla y el público asistente lo noten.

Para ello, los conferencistas deben tener la capacidad para balancear en su discurso una adecuada cantidad de información y conceptos sólidos sobre el tema que se está tratando, en el que se es expertos, con un adecuado nivel de gracia, elocuencia e incluso un buen manejo del sentido del humor, pues esto en su conjunto ayuda a que el tema, la exposición y el programa sean agradables, amenos, digeribles y principalmente interesantes para ambas partes, quien habla y quien escucha.

De esta manera podemos estar seguros de que incluso el más disperso de los individuos registrará algunas de las frases valiosas, importantes y que resultan trascendentales para él, para recordar el tema, e incluso al ponente, quien ofrece la conferencia.

Para lograr esto también es necesario comprender que cada anécdota o historia que se comparte con el público debe tener una relevancia importante para el tema que se está tratando y debe ser un vehículo que facilite el entendimiento de éste, además de ser motivo de múltiples y variadas gesticulaciones que ayuden todavía más en el proceso.

Por supuesto, cada tema, cada persona y cada público implican condiciones, estilos y actividades diferentes, razón por la que el mundo empresarial está lleno de programas diferentes, buenos y malos, que se pueden emplear para conducir de la mejor manera posible una conferencia, pero podemos acordar que todos los buenos programas, a pesar de sus diferencias, están diseñados con base en ciertos elementos y parámetros que garantizan el éxito de la ponencia.

Pensando en muchas de la personas que han acudido a las magnas conferencias del coach Ricardo Garzamont (Ricky Garza), y que tienen la necesidad o tarea de organizar un evento en el que están obligadas a hablar en público, dar una conferencia, exposición o discurso, es decir, a convertirse en conferencistas y dar una imagen profesional, a continuación compartiremos los elementos que consideramos fundamentales para lograr el éxito en cualquier conferencia y que resultan ser también el común denominador entre los buenos programas que otros expertos ofrecen.

  • Dominio y organización del tema. Ser experto en la materia es fundamental para ofrecer una buena conferencia. Pero esto no es suficiente, ya que en una ponencia de este tipo el objetivo no es demostrar los que se sabe ni educar al público, sino promover la reflexión, estimular diferentes perspectivas y ángulos de análisis, provocar el surgimiento de ideas y detonar la aparición de nuevos hábitos y actitudes.

Por lo tanto, al conocimiento del tema se deben agregar elementos como un lenguaje adecuado para la audiencia, excelente organización del tema, actividades que llamen la atención, anécdotas y experiencias interesantes y relacionadas con el tema. En pocas palabras, el conferencista tiene la tarea de construir un puente entre la audiencia y el tema que se está tratando.

  • Absolutamente a nadie le gusta escuchar a una persona que lo único que hace es hablar y hablar sin matices, sin intensidad, sin elocuencia y con muletillas. Por el contrario, la atención sostenida es lo que genera el verdadero interés.

Variaciones en el volumen de voz, velocidad variable del habla, manejo adecuado de las pausas entre frases y puntos, son algunas de las estrategias a utilizar para poder captar al máximo la atención del público, al igual que el humor respetuoso y moderado. Pero, indudablemente, la adecuada elección de las experiencias, anécdotas e historias y su elocuente narración es lo que realmente fortalece el recuerdo de los conceptos en la mente de la audiencia.

  • Esto no significa que los conferencistas deben ser famosos o celebridades para atraer la atención del público y tener éxito en una conferencia, pero sí implica que la persona que se para al frente y expone algún tema debe ser un individuo con un excelente historial en el área, con pleno conocimiento del tema y que dichas credenciales puedan ser acreditadas en caso que alguien decida obtener mayor información, de manera que su profesionalismo no sea puesto en duda.
  • Una conferencia invariablemente genera una cierta expectativa del público hacia el individuo, el tema y la empresa, entidad o institución que representa, por lo tanto, los primeros aspectos que se deben considerar para dar una imagen profesional son la puntualidad, la disposición y un fuerte sentido de responsabilidad para con los asistentes.

En resumen, para llevar a cabo de manera exitosa cualquier tipo de conferencia, exposición, ponencia o discurso es necesario que el programa esté perfectamente diseñado, desarrollado y revisado, se debe tener un vasto conocimiento del tema, se debe ser elocuente y sumamente responsable con la tarea.

Pero lo realmente relevante para ser y lucir como todo un profesional al momento de dar una conferencia es entender que una conferencia no es una simple sesión donde se ofrece información, sino una experiencia para ambas partes en la que se tiene como objetivo sacudir la mente de las personas y construir nuevas ideas, actitudes y formas de trabajo, pues ésta es la tarea principal de los conferencistas.

Así pues, si requieres de los servicios de uno de los conferencistas más calificados y preparados de México, Ricardo Garzamont (Ricky Garza) te ofrece impartir eventos donde la mentalidad y la vida de las personas darán un giro impactante, tanto emocionalmente como de forma profesional, con el fin de modificar su estado de ánimo y potencializar su desempeño. No dudes en visitar la página para conocer testimonios de éxito y para ponerte en contacto con él. ¡Hasta la próxima!

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