El coaching empresarial nos ofrece la oportunidad de conocer nuestros límites, capacidades y potenciales de nosotros mismos, para después estar dispuestos a reinventarnos, no se trata de aprender un temario o una herramienta, sino de estar dispuestos al cambio y al sacrificio a lo largo de nuestro camino, ya lo dijo en su momento Antoine de Saint-Exupéry: “Para ver claro, basta con cambiar la dirección de la mirada” y estas técnicas nos ayudan a cambiar esa dirección.
El coach Ricardo Garzamont (Ricky Garza), sabe que la técnica se diferencia de otras metodologías de ayuda al desarrollo personal, en parte de la premisa de que las respuestas están en uno mismo, la pasión de Ricky Garza es la de comprometerse con las instituciones, aportando su experiencia y conocimientos en pro de un máximo desarrollo.
A tan solo tres meses de cerrar el año en curso, muchos nos vemos obligados a realizar un alto en nuestra vida, revalorar nuestra situación y preguntarnos: ¿Qué hemos logrado en lo que va del año? ¿Cuántas de las metas propuestas al inicio del 2018 hemos alcanzado?
Si durante esta rápida evaluación nos damos cuenta que la balanza no está a nuestro favor y que realmente son más las metas pendientes que las que hemos alcanzado, es probable que comencemos a sentir un cúmulo de emociones que pueden ir desde la ansiedad, desánimo y angustia, pasando por el enojo, que al final son las sensaciones típicas de la frustración. También puede ser el caso de que aunque aparentemente lo tengamos todo: estabilidad, buenos ingresos y un desempeño adecuado… la frustración sigue ahí.
El término Frustración, proviene de la palabra frustrar, que significa, de acuerdo con la Real Academia de la Lengua Española, privar a alguien de lo que esperaba. Se trata de una respuesta emocional que aparece ante los obstáculos de la vida, básicamente cuando hacemos esfuerzos y no obtenemos lo que esperamos.
Sus manifestaciones son múltiples y varían dependiendo de la persona y experiencias de vida, es común escuchar en las conferencias motivacionales, que aunque se trata de una emoción común y frecuente en el ser humano, si no aprendemos a gestionarla adecuadamente, puede traer consigo un continuo sentimiento de decepción que acabará en situaciones repetidas de desmotivación, abandono de objetivos e insatisfacción de todo aquello que nos rodea.
Un colaborador frustrado puede llegar a desarrollar actitud de apatía, experimentar nerviosismo, ansiedad e incluso llegar a presentar enfermedades físicas, disminuyendo así su efectividad en el trabajo.
Es importante, al igual que con cualquiera de nuestras emociones, identificarla, saber la intención positiva que tiene en nuestras vidas y posteriormente gestionarla para realizar los cambios oportunos que nos conduzcan a una mejora de vida, yes que, aunque muchas veces decimos que nos sentimos frustrados, en muchas otras ocasiones lo experimentamos sin saberlo.
Aunque la frustración es un sentimiento normal, la forma en la que la enfrentamos, es lo que hace la diferencia entre que su curso cobre relevancia sobre nosotros o no lo haga, ya que la fuerza y la magnitud con que se manifiestan dichos síntomas asociados, son fundamentales para distinguir entre una frustración transitoria e inocua o una situación de frustración de carácter patológico.
¿A qué se debe esta frustración?
El coaching empresarial nos dice que existe una gran variedad de fuentes o causantes de la frustración, principalmente de tipo externo o interno.
- Las fuentes externas de la frustración: Son aquellas que escapan de nuestro control, corresponden a situaciones sociales o ambientales, tales como la notificación de rechazo a una propuesta laboral que ha conllevado a varios meses de trabajo arduos, un ambiente laboral demasiado tóxico o un mal jefe con el que no existe una buena conciliación
En este tipo de frustración, el control se encuentra fuera del individuo y está vinculado a factores imprevistos, pero de esa persona dependerá dar un paso fuera de lo que ya conoce y buscar otro puesto de trabajo. Los conferencistas como Ricky Garza, nos dicen que aunque hayamos atravesado un mal momento, también hemos obtenido experiencia que nos ayudará a vendernos mejor para la próxima oportunidad laboral. - Las fuentes internas de la frustración: Se identifican como causantes que existen dentro del individuo y están relacionadas al conglomerado de las cualidades y competencias que le caracterizan como ser humano, tales como sus valores, creencias, conocimiento, nivel de introspección, entre otras. En este punto es de vital importancia analizarnos a nosotros mismos, ¿Qué es lo que en nuestro interior no nos permite desarrollarnos?
El coaching Monterrey nos recuerda: La felicidad laboral se alcanza no solo cuando hacemos bien nuestro trabajo, sino cuando ¡Nos gusta!
La frustración es una señal de excitación, de que nuestro cerebro está convencido de que podría hacer las cosas mejor de lo que lo está haciendo ahora, lo cual es muy positivo y significa que la solución está a nuestro alcance, aunque lo que estamos haciendo hasta ahora no funciona y es una señal más para ser flexible.
De acuerdo con los especialistas, la etapa idónea para aprender a manejar la frustración es durante la infancia; sin embargo, no todo está perdido, pues existen algunas recomendaciones, las cuales por cierto aprenderemos a fondo en las conferencias en Monterrey, pero que si las ponemos en práctica en la etapa de adultos, nos ayudarán a salir bien librados cuando notemos sensaciones de frustración en el ámbito laboral.
- Haciéndonos conscientes de la emoción que estamos sintiendo: En ocasiones la frustración la arrastramos desde casa y por situaciones ajenas a nuestro trabajo.
- Permaneciendo en esa emoción el menor tiempo posible: Podemos salir de ellos, manejando nuestros pensamientos, de la misma forma en que le podamos seguir otorgando el poder a la misma línea de pensamientos, para que nos consuman.
- Busquemos el cambio de la situación: La solución no es sentirnos culpables, sino aprender de la experiencia y sacando el mayor provecho posible. Una forma de hacerlo es reajustando nuestra estrategia de crecimiento laboral.
Si están en búsqueda de coaching empresarial, desde motivacional hasta capacitación en ventas para cambiar la perspectiva del panorama en la empresa y aprender a potenciar sus capacidades, el coach Ricky Garza estará feliz de guiarlos. Recuerden que encontrar la solución no es el problema, encontrar el problema es la solución. Y nosotros les podemos ayudar en ese camino: +52 (81) 8220 9206.
